Tienen un valor de 180 mil dólares cada una Mucho champagne pero a Nannis le rematarán dos propiedades  Más allá del nivel de vida que parecen llevar, Claudio Paul Caniggia y Mariana Nannis perderían dos departamentos que tienen en Miami, luego de no poder hacer frente a una abultada deuda. Según diario Crónica, en la avenida Collins 5225 de la ciudad de Miami se encuentra un condominio bautizado por los lugareños “la Casa Rosada”. Allí, 17 años atrás, Mariana Nannis y Claudio Paul Caniggia adquirieron dos departamentos modestos con una decoración básica y de pocos metros cuadrados. Pasado el tiempo, la familia del ex jugador del seleccionado nacional que logró un subcampeonato en el mundial de Italia ´90 se mudó lejos de las famosas playas precisamente a una gran mansión en Marbella, España
A partir de ese momento, los pequeños apartamentos estadounidenses quedaron habitados sólo por los zapatos y antojos de moda que la polémica esposa del Pájaro supo tener en aquellos años.
En la actualidad, mientras Charlotte y Alexander cada día toman mayor protagonismo dentro del programa conducido por Marcelo Tinelli, éstos inmuebles se encuentran en medio de un proceso de remate hipotecario por falta de pago de las expensas comunes del edificio
A través de una investigación, las fuentes confirmaron que las unidades tienen un valor aproximado de 180 mil dólares cada una, hoy convertidas en un apart hotel que, pese a la cifra nada despreciable, poseen muy poco de high class
La posibilidad de que esta propiedad sea perdida por la particular familia surge a partir de una nueva ley del estado de La Florida, que decreta que si un propietario no abona por más de tres meses la expensas, el consorcio le puede iniciar un juicio que termina en el remate de la unidad
En caso de concretarse esta situación, muchos serían los vecinos que festejarían: el nombre de Mariana Nannis es mala palabra. “En este lugar nadie las quiere. Cuando se mudaron, la verdad que muchos sentimos alegría. Tiempo atrás, cuando llegaron aquí con sus hijos recién nacidos, Nannis se mostraba con aire de diva y contrataba un servicio de limousine que en ese entonces costaba 100 dólares por día”, comentó Susan una vecina del lugar. Por su parte, Carlos, un mexicano que desde varios años se desempeña como cuidador del estacionamiento donde Caniggia solía dejar su auto, comentó: “Claudio es un pobre tipo, un dominado que viene de vez en cuando. En cuanto a ella, la recuerdan porque no daba propinas y era una ridícula que con 34 grados de calor usaba unas botas para cubrir sus horribles piernas”.
Lunes, 23 de julio de 2012
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