Tras su encuentro íntimo, el "hermanito hot" aseguró que lo haría de nuevo porque la chica "está recontra buena".

Parece que el aislamiento que se produce entre las paredes de la casa de "Gran Hermano" incita a los participantes del reality show a confesar con cierta impunidad mediática sus más oscuros deseos y anécdotas. Como si el cuento del encuentro sexual con una oveja no hubiese sido suficiente, este año un participante confesó que tuvo relaciones con su propia hermana.

Lejos de arrepentirse, Mario Fredes, de 32 años, aseguró que disfrutó y repetiría la noche de sexo con su medio hermana por parte de padre. El hombre, que se presentó como entrenador de lobos marinos, tuvo sexo con la joven cuando no sabía que estaban emparentados, pero después su madre le señaló que la chica se parecía mucho a la hermana que sí conocía.