Los nacidos el 4 de junio llaman la atención por su rapidez mental y su elocuencia. Aunque al hablar de un tema pueden inspirar positivamente a los demás, cuando expresan su desacuerdo casi nunca son diplomáticos o sutiles. Pese a no estar necesariamente dotados para los puestos de mando, con frecuencia acaban ocupándolos. Sin embargo, cuando se sienten inseguros en esa posición, pueden adoptar una conducta tiránica. En general, estos individuos se sentirán más satisfechos si tienen ocasión de trabajar como miembros de un grupo con poder.

Los nacidos este día deben tener cuidado de no someter su preciada flexibilidad a las normas estrictas, los dogmas y las obligaciones dudosas. Nunca son tan felices como cuando recorren las etapas de aprendizaje de una profesión o un interés, representando el papel de estudiantes o aprendices y esforzándose por perfeccionarse. Necesitan tener siempre proyectos nuevos en el horizonte, ya que se desilusionan con rapidez con cualquier trabajo que restrinja su desarrollo. En casos extremos, trasladan estas frustraciones a la familia, los amigos y los colaboradores.